Caracol

En japonés caracol suena katatsumuri. Es bonito no más y me impulsa a crear esta entrada.

Aunque este molusco bisexual no es animal de bestiario, Claudio Eliano lo menciona como alimento de algunas aves, que lo elevan a gran altura para dejarlo caer sobre las rocas y así quebrarles el caparazón para comérselo.

Un águila procedió de igual guisa con una tortuga y, al estrellarla contra una piedra lisa y bruñida, resultó ser la calva del dramaturgo griego Esquilo en el 456 a.C., cumpliéndose la predicción de que moriría aplastado por una casa. Por eso vivía solo en el campo.

Corominas, en su diccionario etimológico propone, después de hartas teorías, que la palabra ‘caracol’ puede ser concebible como un ‘catalanismo gastronómico’. Y argumenta que “uno de los ejs. más antiguos está en el Arte de Cisoria de Villena (1423), obra llena de costumbres y vocabularios imitados de la corte barcelonesa: en este libro se nos describe la forma de comer urbanamente caracoles (…) con la advertencia de que muchos no gustan de esta comida”.

Jules Renard en sus Historias naturales dice que el caracol tiene el cuello de jirafa encogido y que hierve como una nariz llena. Y Juan Eduardo Cirlot (Diccionario de símbolos) lo asocia al sistema jeroglífico egipcio y la espiral microcósmica de su caparazón.

Por esta misma razón de infinitud, el caracol (o la caracola) es fuente de inspiración. Nono Guirado los utiliza como leitmotiv en sus cuadros.

Para mí el caracol se muestra en plural. Los caracoles es un cante flamenco de la familia de las cantiñas de Cádiz, que provienen del pregón de un mercader por las calles de Madrid.

* Ilustración de Tolouse-Lautrec para el libro de Jules Renard.

10 comentarios

[volandovengo - 02 de abril de 2013 - 01:27]

Bueno, me seguiré esforzando...

[Uno - 01 de abril de 2013 - 23:50]

Por mí, que viva el humor, hay que dale al rollo vacilón, qué caramba. Que momentos de penas en la vida hay muchos y hay que reirse aunque sea con la rima fácil y reirse de uno, que todo lo que uno escribe no puede ser excelso pero es verdd que agradezco la sinceridad y se qué no escribo muy bien ni muy literario y yo le correspondo con la mía y espero me la acepte como.crítico que es y criticas que hace, según mi punto de vista sus dibujos son reguleros na más. Eso es verdad que muchos artículos sí son buenos en mí.opinion.

[volandovengo - 01 de abril de 2013 - 00:33]

Ay!

[maría angustias - 31 de marzo de 2013 - 22:53]

Aparte y salvando las distancias necesarias con el cante, para mi los caracoles no son los mismos desde que no los hacen Paco y su señora en a Plaza Aliatar.

[volandovengo - 31 de marzo de 2013 - 18:41]

También mi comentario tenía su punto de comicidad, Uno. Mi intención no es faltarle el respeto a nadie y menos coartar la libertad de expresión. Al revés, estoy muy agradecido de los pocos comentarios que me hacen. Yo soy el primero que redondeo el el chiste y el doble sentido. Espero que sigas leyéndome e interactuando con mis entradas.

[Uno - 31 de marzo de 2013 - 17:33]

Era sólo humor señor volandovengo creí que sé percataria de ello. Nunca le he faltado el respeto pero creo que esta vez usted si lo ha hecho conmigo. No volveré a meter mis ripios en sus exquisiteces. Un saludo.

[volandovengo - 31 de marzo de 2013 - 12:50]

Espero que no cunda el ejemplo y estos ripios facilones no se prodiguen restando respetabilidad a este blog.

[Uno - 31 de marzo de 2013 - 12:31]

Quien quiera almejas...que se depile las cejas jijiji. Quien quiera un perro que lo busque en un cerro. Quien quiera un pato que vaya a la charca y se siente un rato. Quien quiera un loro le va costar su peso en oro pero del que cagó el moro.

[volandovengo - 31 de marzo de 2013 - 12:10]

Quien quiera musarañas que las busque entre las cañas!

[Dani - 31 de marzo de 2013 - 09:03]

Quien busque animales que vaya a su hábitat. Quien quiera caracoles que los busque en las coles.