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volandovengo

Más sobre las sirenas

Más sobre las sirenas

Ahora, cuando manifiesto mi fe sobre la existencia de las sirenas, se me plantea el problema de su evolución, más que física o morfológica, simbólica e ideológica.

La raíz del conflicto estriba en aunar o diversificar a la sirena. Pues no es lo mismo la sirena de Ulises que la de Kafka, la de Orfeo que la de Cela, la de Apolodoro que la de Borges; sin hablar de la de Disney o la de Hollywood.

Según la mitología griega, las sirenas son las hijas de la ninfa Melpómene (o Calíope) y del río Aqueloo (o del dios marino Forcis). Ese presente de indicativo, puede dar a entender que son sempiternas, o sea que nacieron, pero que aún viven. Aunque tenemos testimonio que también fallecen.

Quedan varadas en la playa, como ballenas suicidas, enredadas en las mallas de los pescadores, devoradas por el apetito ciego de algún escualo o metamorfoseadas en otro animal más o menos racional. Así que estos seres maravillosos tienen principio y también tienen fin.

Atendiendo a lo comentado, su forma está más o menos clara: se trata de una mujer, siempre desnuda, con los cabellos rubios o bermejos o castaños, largos, muy largos; pero que, desde la cintura, desaparece su forma humana y comienza una gran cola de pez.

Siendo la sirena, según estas indicaciones, mitad pez mitad mujer desnuda, ¿respirará por branquias o por pulmones?, ¿será mamífero o será anfibio como los batracios?

Pero no fueron peces en un principio. En la Antigüedad clásica, estas ninfas marinas, fueron transformadas en aves por Ceres. Así fueron representadas, con cuerpo y alas de pájaro, con cabeza y senos de mujer y tocando la lira o la flauta (así aparecen en numerosos vasos griegos), lo que resultarían más cercanas a las odiosas arpías que a las sensuales cantoras.

Su aspecto romántico es de tradición nórdica. En las orillas mediterráneas surgió en época muy posterior, cuando los artistas y soñadores del románico (en todas las épocas se sueña) decidieron representarlas de la manera que las conocemos popularmente (posiblemente por inspiración bárbara). Y su propuesta cuajó como se impuso el palitroque en los caramelos para darle vida al chupachup.

Las sirenas que atormentaron al Ulises homérico atado al mástil de su embarcación eran seres alados que seducían con su canto y no hermosas doncellas que despertaban la libido con su encanto (ya se encargó Circe de ese cometido).

Como aves, las sirenas, habitaban en lugares escarpados desde donde atraían a los caminantes para devorarlos. Ulteriormente aparecieron las sirenas de cola de pez, como hemos dicho, habitantes de las islas rocosas y de los arrecifes, las cuales se comportaban igual que sus hermanas del elemento aire.

Puede que en realidad su cambio no sea una metamorfosis o fruto de la evolución, sino puede que convivan las sirenas-pez y las sirenas-ave. Ricardo de Fotirnivel, hacia 1250, explica en su Bestiario del Amor: “... Pues hay tres guisas de Sirenas, dos de las cuales son medio mujeres y medio peces y la tercera, medio mujer y medio ave...”.

* "Una sirena" de John William Waterhouse, 1901, Royal Academy of Arts, London

8 comentarios

volandovengo -

Todos tenemos reductos en el alma, apartados en la imaginación, donde muy bien pueden hacerse un hueco las sirenas. Gracias por tu comentario, Mily.

mily alomia dextre -

mi comentario es que las sirenas no existen porque yo en algunas oportunidades se que edxsiste pero yo no creo porque son puros cuentos me despid chao

volandovengo -

Es un tema apasionante el de las sirenas, volveré a él. No hay otro ser que ocupe tan nítidamente la fantasía de los seres humanos.

winnie -

las sirenas son hermosas como camuflage las aletas son para defenderse su canto
tambien y sus instrumentos son muy inteligentes

Identidade -

Una cosa que siempre parece pasar desapercebida: las sirenas saben de lo pasado y de lo futuro. Ese es lo canto que encanta. Así dice Homero a nosotros.

volandovengo -

Patón, me gustaría leer ese trabajo de tu madre sobre las sirenas (todas las madres tienen algo de sirena) (también de hada).
Joven llanos, creo que ya pusiste algo de Héroes y te dije que no comulgaba con ellos, a veces con Búmbury en solitario (si no lo estoy viendo). De todas formas, creo que tienen letras más que decentes y esta es una de ellas. José Luis Sampedro tiene una obra que se llama también "La sirena varada".

joven llanos -

Espero que sea de tu agrado, tu artículo me lo recordó totalmente

La Sirena Varada
Heroes Del Silencio

Y me he enredado siempre
entre algas,
maraña contra los dedos.
cierras la madeja
con el fastidio del destino,
y el mordisco lo dan otros;
encías ensangrentadas,
miradas de criminales,
a grandes rasgos,
podrías ser tú.
Echar el ancla a babor
y de un extremo la argolla
y del otro tu corazón.
Mientras tanto, te sangra.
Y el mendigo siempre a tu lado,
tu compañero de viaje.
cuando las estrellas se apaguen,
tarde o temprano,
también vendrás tú.
Duerme un poco más,
los párpados no aguantan ya,
luego están las decepciones
cuando el cierzo no parece
perdonar.
Sirena, vuelve al mar,
varada por la realidad.
Sufrir alucinaciones
cuando el cielo no parece
escuchar,
dedicarte un sueño,
cerrar los ojos
y sentir oscuridad inmensa,
entregado a una luz,
como un laberinto de incertidumbre.
esquivas la pesadilla.
y sobrevolar el cansancio
y en un instante,
en tierra otra vez.
el miedo a traspasar la frontera
de los nombres,
como un extraño.
dibuja la espiral de la derrota
y oscurece tantos halagos,
sol, en la memoria que se va...
y duerme un poco más,
los párpados no aguantan ya,
luego están las decepciones
cuando el cierzo no parece
perdonar.
sirena, vuelve al mar,
varada por la realidad.
sufrir alucinaciones
cuando el cielo no parece
escuchar.


Patón -

Mi madre hizo un trabajo para la Universidad sobre las sirenas. Es, ciertamente, un tema apasionante.