Icolodógico
Ahora resulta que mi niño se ha inventado un idioma. Creo que fue el viernes a última hora. Empezó a enhebrar palabras sin sentido entonando una canción. Como siempre me intereso por sus cosas le pregunté en qué idioma estaba cantando. Como siempre se interesa por mis cosas, me miró a la cara interrogativamente, como diciendo ¿adivínalo?
Le sugerí inglés, francés, alemán, checoslovaco antiguo, valenciano de prisa... A todo me respondía que no. Cuando se me acababan las propuestas, él dijo impasible: es icodológico.
—¿Qué?, pregunté ignorante. ¿Icodo...?
—No. Icolodógico, aclaró orgulloso de enseñarle algo nuevo a su padre, que se la da de listo. —Estaba cantando La Tarara en icodológico, concluye.
Y que no se le olvida la palabreja.
El sábado siguió interrogándome: —¿Sabes como se dice tal (lo que sea) en icolodógico?
—(¿?).
Y me lo dice. Y lo repite para reafirmarse en su nueva palabra inventada. Pero después le preguntas y cambia el término.
—¿Qué pasa?
—Nada, responde con toda naturalidad. En icolodógico cada vez se dice de una forma.
—¿Ah? Voy a escribirlo, para que no se me olvide, le digo.
En el periódico, donde compongo el crucigrama, me dispongo a anotar el nombrecito del idioma. Pero él me quita el boli diciendo que en icolodógico se escribe así (véase foto superior).
Incluso icolodógico en icolodógico se dice de otra forma que aún no he aprendido.
3 comentarios
volandovengo -
Jesús, espero que siga evolucionando, que siga dándonos sorpresas.
Jesús Lens -
Excelente narración.
H. -