Nunca llueve a gusto de todos
A estas alturas no creo que nadie esté a favor de una lluvia tan persistente y destructiva como la que nos viene cayendo, pero hay colores, como quien prefiere el exceso que el defecto. ¿O es mejor pasar de los 40º y ver agrietarse la tierra durante equis días?
Habrá quien no se pronucie, como quien diga aristotélicamente que en el medio está la virtud, que no nos vayamos a los extremos.
Pienso, no obstante, que la eterna primavera es aburrida, que la bonanza sin aristas llega a cansar. No sé quien escribió que nuestros primeros padres ante la oferta divina del paraíso terrenal tuvieron la delicadeza de decir: no, gracias.
Hace unos días, en el artículo de mi blog La buena suerte (http://volandovengo.blogia.com/2010/030201-acerca-de-la-buena-suerte.php), me encontré un comentario de un tal David Montoya que me hizo daño especialmente.
David critica mi crítica sobre el Festival de Monachil (http://volandovengo.blogia.com/2010/020601-prueba-superada.php), aquel que presenté a mi estilo, porque no sé hacerlo de otra forma.
Desde que empecé a escribir en el periódico, hace más de 6 años, establecí unas normas, como un compromiso ético, una autocensura honrada. En primer lugar me prometí ser respetuoso, no ofender a nadie conscientemente. En segundo lugar quise primar los valores por encima de los defectos, ensalzar lo bueno y minimizar los errores. En tercer lugar, y no por último, intentar hacer de mi crónica algo útil, que sirviera para impulsar el flamenco y a los flamencos, que fuera una constante para este mundillo, intentar estar en todos lados, darle igual importancia a todo, y, entre líneas, que el artista que quisiera tomara nota de lo que yo, desde mi humilde tribuna, pensaba que eran sus debilidades.
Ahora me encuentro que soy la víctima, el cazador cazado. Y que ninguno de los principios expuestos se ha respetado. Cada vez el fondo lo veo más cerca y esta tormenta, desde luego, no es de mi gusto.
7 comentarios
volandovengo -
Ellen la danesa -
volandovengo -
Tenía flamenco, por eso no pude ir a lo de Favelis, que me hubiera encantado.
Rigoletto -
Salud y que no te cambie el ánimo un comentario como el de David Montoya.
Rigoletto
PS Por ciertto, ayer te perdiste una gran presentación en NUeva Gala.
Lara Cano -
No creo que lo tuyo fuera eso, jejejeje.
He estado leyendo el comentario de este hombre y me ha parecido una mezcla entre censura y megalomanía. Lo mejor: que no se puede opinar sin saber. ¡Pues estamos apañaos! Otra cosa es que se quiera imponer. Pero opinar se puede opinar teniendo o no conocimiento de causa. Luego, si eso, se dialoga.
En fin, vaya tufillo a años atrás...
volandovengo -
Lara Cano -
Tomarse a la tremenda las terceras opiniones y, posteriormente, autoflagelarse por ello, es el fin de la libertad de uno.